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CONSECUENCIAS DISTRITALES
DEL FENÓMENO
INUNDACIÓN
EL FENÓMENO
INUNDACIÓN:
La concurrencia del clima y la fisiografía ha provocado un aumento
progresivo del nivel de la capa freática, llevándola desde su
profundidad original (entre 8 y 10m en la década del 70) a ubicarse cerca
de los 2 m en la actualidad. De esta forma la región ha perdido su
capacidad de amortiguación de los grandes excedentes hídricos. Es
importante observar que a mediados de 1998, el 40% del partido se
encontraba inundado. Situación que ha mejorado actualmente. Este
fenómeno es uno de los problemas más graves para el sector agropecuario
de Lincoln, es decir que es urgente que se realicen intervenciones
integrales o definitivas que permitan revertir o atenuar los efectos
negativos: degradación física y química de los suelos, enmalezamiento,
deterioro y pérdida de la infraestructura y pasturas, mortandad de
hacienda, pérdida de cosecha etc.
La economía del distrito se ha
visto considerablemente afectada desde hace unos años. La evolución de
la cosecha gruesa (maíz y soja) se ven muy perjudicadas por el
anegamiento y la falta de piso. Se hacen evidentes los retrasos en el
comienzo de la preparación de los lotes para cosechas finas posteriores (trigo,
cebada, avena, colza).
En ganadería, se ve muy perjudicada por la superficie con pasturas y/o
praderas naturales.
La forestación ha sufrido continuos castigos de vendavales y tornados que
han destruido numerosas y variadas especies, de difícil reposición por
el ascenso de las capas freáticas.
Sobre un total de 578.134 Has., extensión
total del partido de Lincoln, a mediados del año 1993 se encontraba el 50%
afectadas por inundaciones.
LAS
PERDIDAS POR INUNDACIONES FUERON:
COSECHA
GRUESA POR HECTÁREA SIN CULTIVAR $ 19.800.000
PRODUCCIÓN
LECHERA (PÉRDIDA MENSUAL) $ 1.300.000
PRODUCCIÓN
DE CARNE (PÉRDIDA MENSUAL) $ 2.000.000
PASTURAS
$2.700.000
APICULTURA
$ 1.000.000
Una
proyección anual de las pérdidas descriptas, hacen un total de $53.150.000
en el año 1993, situación difícil de remontar si se tiene en cuenta que,
a la fecha, no se ha producido una recuperación ostentables de las zonas
afectadas.
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